Emily Ratajkowski dio una entrevista que haría muy orgullosa a Emma Watson
La modelo sabe usar el poder de sus curvas en beneficio de
las mujeres.
Después de hacerse un nombre en el controversial video de
Robin Thicke, Blurred Lines, Emily Ratajkowski, despegó a la fama para ser
conocida como una de las mujeres más sexis de la industria. Sin embargo, ella
dice que esa etiqueta le ha traído grandes dificultades.
En la portada de la última edición de la revista ES, la
chica de 24 años revela cómo su apariencia le ha causado problemas a lo largo
de su vida y su carrera
Emily empezó a ver cómo atraía atención negativa por su
apariencia desde que comenzó la pubertad a los 11 años. “Me di cuenta de que me
percibían diferente”, dice. “Básicamente era más sobre cómo la gente tenía
problemas con una niña que se veía como una mujer, porque los confundía, los
hacía sentirse incómodos. Creo querían provocar mucha culpa”.
Esa apariencia la ayudó a convertirse en una modelo exitosa,
pero todavía sufre por estar atrapada en una sola dimensión del mundo de la
actuación.
“Es una paradoja interesante. Si eres una actriz sexy es
difícil que te den papeles serios. Te ofrecen lo mismo en lo que ya te han
visto”, explica. “Las personas son como ovejas. Están como ‘Oh, ella hace eso
tan bien’. Es tan tonto, porque las mujeres son el 50 por ciento de la población
y ellas quieren gastar dinero para ver películas donde las interpreten
personajes de tres dimensiones”.
Sobre la igualdad, explica por qué es feminista y qué
significa exactamente la palabra “feminista” para ella.
“Cualquier mujer, así esté cómoda o no con la palabra
feminista, probablemente quiere ser igual al hombre, y eso es fundamentalmente
de lo que se trata el feminismo”, dice. “Creo que hay un estigma asociado a la
palabra, pero para mí significa hablar sobre la manera en que vemos a las mujeres
y cómo las juzgamos diferentes que a los hombres. También es sobre el permiso
de maternidad, y la igualdad de sueldos para las mujeres”.
Ser feminista precisamente es la razón por la que apoyó el
selfie de Kim Kardashian desnuda, que varias mujeres destrozaron a principios
de este año. Emily todavía no se ha reconciliado con los comentarios de Piers
Morgan.
“[Él] habló del hecho de que Kim tiene 34, es madre, y de
que ya superamos verla de una manera sexual, cosa con la que tengo muchos
problemas”, explicó. “Él también sugirió que su esposo [Kanye West] escribía
sus tuits, como si no fuera capaz de escribirlos ella misma, lo que para mí es
increíblemente sexista”.
Después de que Emily apoyó a Kim en Twitter, la estrella de
reality le mandó flores. “Después decidimos hacernos un selfie sin nuestras
partes de arriba [mostrándole el dedo del medio] a la cámara, lo que creo que
habla por sí mismo”, explicó. “Escribí en twitter sobre la idea que estaba
detrás: cómo las mujeres necesitan espacio para ser sexuales”.
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